La pregunta suena un poco rocambolesca, porque cualquiera puede vivir justo encima o al lado de un bar o cafetería donde sirven bebidas alcohólicas y no tiene porque convertirse en un beodo por esto… ¿no? Bueno, pues unos investigadores del gélido país de Finlandia se lo han planteado, y parece ser que la respuesta es afirmativa.
Este grupo de científicos finlandeses hizo un estudio con hasta 55.000 adultos durante siete años, en el cual descubrieron que si, las personas que vivían más cerca de un bar eran más propensos a aumentar su consumo de alcohol. Todos los resultados que...