Una investigación realizada por Matthew Shaffer, estudiante de doctorado en psicología UT y Veronica C. Smith, profesora adjunta de psicología en la Universidad de Mississippi, revela que la primera experiencia sexual puede establecer la pauta para el resto de nuestra vida sexual.
Este estudio se publica en la revista Journal of Sex and Marital Therapy, y es el primero en examinar si las circunstancias en las que se pierde la virginidad tienen consecuencias duraderas.
“La pérdida de la virginidad es a menudo visto como un hito importante en el desarrollo humano, lo que significa una transición a la edad adulta”, dijo Shaffer. “Sin embargo, no ha sido estudiada en esta capacidad. Queríamos ver la influencia que puede tener en relación con el desarrollo emocional y físico.”
Los investigadores examinaron cómo la satisfacción sexual de la primera vez impacta a largo plazo sobre la función sexual, así como las respuestas físicas y emocionales de la primera vez afectan sobre las experiencias sexuales a largo plazo.
Descubrieron que primeras experiencias positivas fueron predictivas de satisfacción física y emocional. En concreto, los que se sentían amados y respetados por sus compañeros, definen sus encuentros sexuales posteriores como más emocionalmente satisfactorios.
Para realizar esta investigación, los investigadores preguntaron a 331 hombres y mujeres jóvenes acerca de cómo perdieron su virginidad. Los participantes anónimos clasificaron la experiencia de acuerdo a las emociones relacionadas con la ansiedad, alegría y pesar. También respondieron preguntas sobre su vida sexual mediante escalas de medición de la sensación de control, la satisfacción y el bienestar. Finalmente, los participantes completaron un diario durante dos semanas en el que describen cada experiencia sexual.
Una serie de análisis reveló que los que estaban más emocional y físicamente satisfechos la primera vez encontraron su vida sexual más satisfactoria. En cambio, los que reportaron mayores niveles de ansiedad y negatividad con la primera vez, manifestaron un menor funcionamiento sexual global.
“Aunque este estudio no prueba que un mejor momento para la primera vez conlleva una mejor vida sexual en general, la experiencia de una persona al perder su virginidad puede establecer el patrón en los próximos años”, dijo Shaffer.
Shaffer sugiere que la primera experiencia sexual puede crear un patrón general de pensamiento y de conducta que guía las experiencias sexuales y el conocimiento de la información relativa a la sexualidad.
Fuentes: Science Daily